domingo, 8 de noviembre de 2009

No hay originales de la Biblia





Los apócrifos que han llegado hasta nuestros días son reproducciones hechas en tiempos disímiles. Solamente se han conservado copias, igual que los canónicos. Cuando en una Biblia dice “traducción teniendo a la vista los textos originales”, se está haciendo referencia a copias relativamente antiguas. Nada más. Téngase bien claro, no existen originales de la Biblia, ni canónicos ni apócrifos. Todos se han perdido. Sólo existen pedacitos de papiros dispersos del Nuevo Testamento. Todos estos fragmentos son después del año 200. Antes no hay nada de nada. Mencionemos algunos de los trozos de papiro supuestamente del año 200 (ojo: pueden ser más recientes, pero no más viejos, y quien sabe si en lugar de ser copias, sean en verdad los originales. Eso implicaría que la Biblia se escribió más tarde de lo que se pensaba.

Extractos de papiros bíblicos encontrados:

• P52: Contiene el versículo 18:31 del evangelio de Juan. Encontrado en Egipto.
• P64, P67 y P77: Son versículos de Mateo.
• P66: Algunos versículos de Juan.
• P75: Evangelio de Juan y algo del de Lucas.
• P32 y P46: Epístolas de Pablo
• P98: Algo del Apocalipsis.
• Pergamino 0189: Fragmentos de Hechos.
• P45, P46 y P47: (papiros Chester Beatty) Por primera se encuentra Hechos y las Cartas de Pablo juntos con partes de los cuatro evangelios. Data del año 300.

A partir del siglo III, proliferan las copias sueltas de los 27 textos neotestamentarios. Pero las versiones casi completas más antiguas que han sobrevivido del Nuevo Testamento pertenecen al siglo IV (¡y contienen apócrifos que los sacaron!) son el códice Sinaítico y el códice Vaticano, que están cuidados como oro en el Museo Británico y el Museo Vaticano respectivamente.

Soporte material


La arqueología bíblica ha encontrado copias en papiro, pergaminos y en códices. ¿Cuál es la diferencia? El papiro son hojas de la planta papiro engomadas. Son muy frágiles. En cambio, el pergamino es más resistente porque está hecho de cuero. Cuando los papiros o pergaminos se enrollaban se denominan “rollos”. Se dice que éstos manchaban las manos por la tinta que botaban. Cuando los escritos se cosían en forma de libros encuadernados (ya sean papiros o pergaminos) se les llamaba “códices” (codex). Los escritos de la Biblia se empezaron a juntar primero en rollos y luego en códices.

Versiones y tensiones

Los apócrifos y los canónicos neotestamentarios están escritos en griego popular (koiné), que era el idioma comercial de la época, como decir el inglés ahora. También hay inserciones en arameo, la lengua que hablaba Jesús (dialecto regional hebreo de ese tiempo). Más adelante, los apócrifos fueron traducidos al latín y luego a idiomas orientales como el copto (egipcio cristiano), siríaco (que se parece al arameo), etíope, armenio, árabe y eslavo. Circularon clandestinamente por toda la Edad Media. ¿Por qué? Los apócrifos al no estar dentro del canon (que fue un canon cambiante durante siglos, ojo), se traducían más rápidamente a las lenguas vernáculas sin tanto protocolo.

Paradójicamente, las copias orientales de los apócrifos por ser informales y subrepticias, sobrevivieron a la monstruosidad negra de la Inquisición. Y hoy son las copias apócrifas más fieles y menos censuradas que tenemos, puesto que tuvieron menos roce con la Iglesia Católica Apostólica y Romana. Aquí hay que hacer una salvedad. Las traducciones orientales apócrifas por el hecho de estar más libres y sin el corset del status quo católico, se contaminaron con las leyendas y tradiciones propias del lugar. Esa es la razón por la que muchos apócrifos parecen extraídos de las páginas de “Las Mil y una Noche”. Eso no quiere decir que no tengan un fondo de verdad.

¿Sabía usted que las Biblias orientales incluyen apócrifos prohibidos por la Iglesia Católica? Los cánones bíblicos difieren según la Iglesia que sean: católica, protestante, griega, copta, nestoriana, armenia o etíope. Así, en la Bíblia armenia encontramos Corintios 3, en la copta a Clemente 1 y 2, en la etíope hayamos agregado el famoso Libro de Enoc, entre otros más. ¿Por qué la Iglesia católica no incorpora esos apócrifos en su Biblia como lo hace la Oriental? ¿Les faltan cojones?

¿Cuál fue su base de datos?

¿De donde obtuvieron los escritores bíblicos la información para hacer sus libros? ¿Del Espíritu Santo? Ya, pero eso es una metáfora, ¿no es cierto?, porque no creo que una paloma de verdad se ponga a hablar en el oído de nadie, aunque todo puede suceder en el mundo mágico de la Biblia. Fuera de bromas. ¿Cómo se crearon los evangelios? Después que murió Jesús, sus discípulos se pusieron a contar su historia. Eran testigos presenciales. Así, de boca en boca, trasmitidas oralmente empezaron a conservarse y enriquecerse las tradiciones sobre un Mesías que hacía maravillas. Al pasar el tiempo, se dieron cuenta que mejor era dejar por escrito esas maravillas para que no fueran olvidadas y pasaran así a la posteridad (Lucas 1:1-4).

Entonces se elaboró una lista esquemática de los hechos, milagros y frases de Jesús, pero sin hilo conductor. Sólo una colección de logias (dichos) sueltas sin atar cabos. Así han deducido los estudiosos la existencia de la Fuente Q (de quelle que significa “fuente” en alemán), también denominada “Logia”. Se piensa que los escritores de Marcos (¿por qué pensar que fue un solo escritor?) se basaron en esta fuente. Luego Mateo y Lucas tomaron de Marcos porque se han hallado incontables hechos en común entre ellos. De 662 versículos de Marcos, 406 son comunes a Mateo y Lucas. Esa es la razón que a Mateo, Marcos y Lucas se les conozca como los “evangelios sinópticos”. Parece que Juan bebió de otra fuente, que los expertos han bautizado con el nombre de “Evangelio de los Signos”. El historiador cristiano Eusebio de Cesárea habla una “Logia” que se perdió. Algunos creen que esa logia perdida (fuente Q) es el Evangelio de Tomás.

De otro lado, paralela a la fuente escrita, siguieron circulando las tradiciones orales sobre el Nazareno y recién en siglos posteriores se plasmaron en formato escrito. Existieron tradiciones sobre Jesús de viva voce, más allá de las Escrituras. A pesar de la oposición de la sóla scriptura, movimiento que propugnaba que sólo lo que estaba en la Biblia era verdadero. Las tradiciones orales tardías serían el origen indudable de muchos apócrifos. La discusión continúa hasta nuestros días.

11 comentarios:

  1. Cuando se dice que fueron dados por el Espíritu Santo hay que considerar la posibilidad de que fueran recibidos mediante la "escritura automática". No es ninguna tontería. Únicamente es un punto de vista menos racional. No por ello menos verdadero. Y sí podría ser que hubieran sido recogiso a través de este método de comunicación. Entre otras cosas por algo se llaman "escrituras", no?

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    1. menos racional?,la biblia casi en su totalidad es bastante irracional

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  2. Mateo y Juan fueron apóstoles y por tanto testigos presenciales del ministerio y vida de Jesús. Marcaos en parte.
    Mateo escribió su evangelio en Palestina alrededor del 41 EC, Marcos en Roma alrededor del 60-65 EC. Lucas en Cesárea cerca del 56-58 EC y Juan en Efeso cerca del 98 EC, por lo tanto no se inspiraron en la misma fuente.

    La Biblia (los 66 libros) fue inspirada por Dios: Hebreos 4:12; 2 Pedro 1:20,21; 2 Timoteo 3:6;Juan 17:17;
    Los 66 libros de la Biblia están en perfecta armonía, los apócrifos no son inspirados entre otras razones porque contradicen y son lo opuesto a los 66 libros canónicos y contienen enseñanzas paganas como por ejemplo la inmortalidad del alma, el infierno, etc. Para mas información consultar pagina web jw.org

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    1. Las muchas contradicciones entre los cuatro evangélicos canónicos, así como el desconocimiento de las costumbres judías del siglo I nos hace dudar de que estos escritos evangélicos actuales hayan sido obra de un testigo ocular como si lo fueron sus discípulos Mateo y Juan, Marcos no conoció a Jesús sino a través del apóstol Pedro y Lucas tampoco, lo que hizo fue buscar información de fuentes orales o también escritas, porque parece ser que hubo un evangelio mucho más antiguo que los cuatro conocido como el evangelio “Q” (palabra que viene del alemán quelle y que quiere decir fuente.) ya que tanto en los evangelios de Mateo y Lucas hay dichos de Jesús que no se encuentran en Marcos que se supone que es el más antiguo de los dos y que les pudieron servir de fuente. Los importantes hallazgos arqueológicos del siglo pasado, estos es en el Mar Muerto y en Nag Hammadi los años 1947 y 1945, respectivamente, nos han dado un enfoque del ambiente social y político en que se vivía en la palestina de entonces, los evangelios apócrifos de Nag Hammadi que sumas algo más de cincuenta textos nos dicen a las claras que entre los primeros cristianos no existía un consenso único respecto a la doctrina de Jesús, hasta antes del término del primer siglo EC no se sabía con exactitud la fecha ni la ciudad de nacimiento de Jesús, seguramente que para Juan y Marcos no les cabía duda que Jesús era Galileo de nacimiento, las fuentes recogidas por Lucas al respecto son muy controvertidas porque nos hace nacer a Jesús cuando el Censo de Quirinio que para todo aquel que está informado sobre los hechos históricos de la época este censo se efectúa al décimo año de gobierno de Arquelao, hijo de Herodes el Grande quien ya había muerto el año que su hijo asume el reinado de Judea; contradiciendo con lo relatado por Mateo quien nos dice que Jesús nace cuando Herodes El Grande aún vivía; esta diferencia de fechas nos distancia el nacimiento de Jesús entre uno y otro texto evangelista en nada menos que diez años; esto no es novedoso, ya Renán en su libro “Vida de Jesús: escrito en 1868 hace esa observación; inclusive algunos autores contemporáneos ironizan diciendo al respecto: “Así que el Jesús del evangelio según Mateo ya tenía once años cuando nació en las mismas condiciones y en el mismo lugar, el Jesús del evangelio según Lucas” (Pag. 42 “Jesús o el Secreto Mortal de los Templarios” R. Ambelain, Ediciones Martínez Roca, Barcelona-España, 1982)

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  3. Para empezar, decir alegremente que los evangelio de Mateo y Juan fueron escritos por el Mateo y Juan bíblicos, cuando sus fragmentos más antiguos datan del año 200, es algo completamente infundado.

    "Los 66 libros de la Biblia están en perfecta armonía", Sí, cómo no....

    Y para terminar haciendo publicidad de la página de los Testículos de Jehová. :facepalm:

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  4. Al autor de este tema, todo sueno muy bonito y real. Hablas con "autoridad", que te da respaldo para que quien te lea sienta seguridad que dices la verdad. Cuáles son tus fuentes históricas? y sobre todo: porque la gente debería de creerte a tí y no a la Iglesia?. Hablas con una seguridad absoluta que la Iglesia no aceptó los libros que propones y haces una relación histórica de los mismos, porqué te deberíamos de creer a tí y no a una institución de más de dos mil años?. Cómo puede un verdadero crítico (y no el idiota empedernido) afirmar "que ésta es la verdad verdadera a creer" y lo demás puro cuento? y lo más ridículo: afirmas que después de tanto tiempo TÚ eres el privilegiado de conocerla y transmitirla TÚ y sólo TÚ' ????????????????????????????. Mejor cuéntanos una de vaqueros que es más creíble mi hermano.

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    1. Oto Caceres los cuatro primeros libros que forman parte del Nuevo Testamento y documentan hechos y dichos de Jesús durante su magisterio, no son, como se podría creer, un conjunto de escritos homogéneos y armoniosamente complementados entre sí; más bien existen entre ellos algunas inexplicables contradicciones sobre un mismo hecho referido a la vida de Jesús; por lo que se deduce que hubieron agregaciones o interpolaciones posteriores a los escritos originales. Lastimosamente no tememos ni siquiera un pedazo de papiro de los escritos originales de estos cuatro evangelios dentro del siglo I de nuestra era, época donde se supone fueron redactados estos libros. Cuando fueron recopilados y compuestos los libros considerados canónicos de la Biblia en el año 350 E.C., según la tradición se supuso que dentro de los evangelios en el Nuevo testamento el más antiguo era el de Mateo (por esta razón es el primer libro del NT), la idea de que el escrito de Mateo era el primero viene de Ireneo de Lyon (nació en el 130 E.C. y murió en el 202 E.C., fue uno de los primeros padres de la iglesia católica discípulo de Policarpo, obispo de Esmirna quien a su vez fue discípulo del apóstol Juan), por mucho tiempo se tuvo la idea que los evangelios de Mateo y Lucas fueron anteriores que la de Marcos sin embargo en el año 1838 Ch. H. Weisse y Ch. G. Wilke propusieron de forma independiente una nueva hipótesis que estaría llamada a tener una gran fortuna: el evangelio de Marcos no era un resumen de los otros dos, sino el que les había servido de fuente. Esta hipótesis se basaba en la observación de que Mateo y Lucas coinciden entre sí en el orden sólo cuando coinciden con Marcos. Weisse postuló además la existencia de una fuente de dichos común a Mateo y a Lucas, poniendo así las bases de la hipótesis de una fuente quizás mucho mas antigua que la de Marcos y que componen sentencias o dichos de Jesus durante su magisterio, esta fuente es la que actualmente denominan los eruditos Fuente “Q”; sin embargo no se ha hallado vestigios de estos escritos.

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  5. Interesante tu artículo, y no por lo novedoso, que no lo es, sino porque manifiesta el esfuerzo de investigación de tu parte sobre este tema lo cual te felicito. Igualmente yo he venido siguiendo en la búsqueda del Jesús real e histórico es estos últimos anos lo que también me obligo a buscar fuentes extra bíblicas y de libros de autores y eruditos sobre historiografía bíblica; debo partir por fundamentar que los actuales evangelios no recogen los hechos y la vida del Jesús real, me tomare la libertad de parafrasear un texto de John Meier de su libro “Jesús, un Judío marginal”: “el Jesús histórico no es el Jesús real, ni el camino fácil para llegar a él. El Jesús real no está a nuestro alcance ni lo estará nunca. Esto es verdad , no porque Jesús no haya existido – que ciertamente existió- sino sobre todo porque las fuentes que han subsistido no recogieron, ni jamás intentaron recoger todos, ni tampoco la mayor parte de los dichos y hechos de su ministerio publico y mucho menos aún , del resto de su vida. (pg. 30, Editorial Verbo Divino, Pamplona, España, 1991)

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    1. Continuando mi comentario anterior debo empezaremos diciendo que a la fecha no se han encontrado ni siquiera un pequeño pedazo de papiro o pergamino de los evangelios originales canónicos que según se cree fueron redactados entre los años 70 y 100 Ec; todos los fragmentos encontrados a partir del siglo II EC han sido copias de copias de los originales y se duda de su fidelidad, especialmente con los escritos y copias completas de los códices Sinaitico y Vaticano del siglo IV, en el que hallamos los cuatro evangelios completos, así como los demás libros del Antiguo y Nuevo Testamento que conforman la Biblia tal como lo conocemos en la actualidad, y en cuanto a los libros de los evangelios decimos que dudamos de su fidelidad; por muchas razones, veamos: En primer lugar las referencias que se tienen de los evangelios de San Mateo y de San Marcos los tenemos en los escritos de Papias quien fue un obispo de Hierapolis, discípulo de Ireneo quien a su vez fue discípulo de Policarpo uno de los primeros padres de la Iglesia que conoció al apóstol Juan, pues en uno de sus escritos expresa lo siguiente en relación de los evangelios antes citados: “Marcos, que fue intérprete de Pedro, escribió con exactitud todo lo que recordaba, pero no en orden de lo que el Señor dijo e hizo. Porque él no oyó ni siguió personalmente al Señor, sino, como dije, después a Pedro. Éste llevaba a cabo sus enseñanzas de acuerdo con las necesidades, pero no como quien va ordenando las palabras del Señor, más de modo que Marcos no se equivocó en absoluto cuando escribía ciertas cosas como las tenía en su memoria. Porque todo su empeño lo puso en no olvidar nada de lo que escuchó y en no escribir nada falso». Esto relata Papías referente a Marcos. Sobre Mateo dice así: «Mateo compuso su discurso en hebreo y cada cual lo fue traduciendo como pudo» (Historia Eclesiástica Libro III por Eusebio de Cesárea, capitulo XXXIX). Esto se escribió hacia el año 125 o 130 EC, por lo que deducimos que los evangelios que conoció Papias no eran tan iguales a los que tenemos en la actualidad,

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    2. Beatriz para terminar con mi comentario anterior debo agregar que en el caso de Marcos algún copista posterior se dio el trabajo de ordenarlos cronológicamente los escritos anecdóticos de los hechos de Jesús según alguna otras tradiciones o escritos tanto de Lucas como las de Juan u otros textos existentes en la fecha, porque es bueno poner de conocimiento que en esos años ya circularían alrededor de más de cuarenta evangelios relacionados con los hechos y dichos de Jesús; en cuanto a Mateo me parece que ha sido el documento donde más interpolaciones ha recibido de parte de los monjes copistas en relación a los otros evangelios ya que una cosa son sentencias y dichos de Jesús y otra una relación biográfica de la vida de Jesús tal como lo conocemos el Mateo de nuestros días, lo que nos hace deducir que en el transcurso de 200 años antes que se confeccionaran los códices Sinaitico o Vaticano (en la época de Constantino en el siglo IV EC) los monjes copistas latinos han ido agregándole a estos primeras sentencias narraciones seguramente sacadas del evangelio de Marcos; tal como concluye Ernesto Renán en su Libro “Vida de Jesús” cuando escribe: “Ahora bien el estado actual de los textos, el evangelio según Mateo y el evangelio según Marcos, ofrecen partes paralelas tan largas y tan perfectamente idénticas que es necesario suponer o que el definitivo redactor del primero tenia a la vista el segundo o que el definitivo redactor del segundo tenia a la vista el primero, o que los dos han copiado del mismo prototipo. Lo que parece más verosímil es que, ni en cuanto a Mateo, ni en cuanto a Marcos, tenemos las redacciones originales; que nuestros dos primeros evangelios son arreglos en los que se ha tratado de llenar las lagunas de un texto con las del otro.” (pag.46, Ediciones D. A. F., Goya, Madrid, 1968)

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  6. Magnífico texto, tu sabrás decirme de dónde se basó la iglesia católica para crear la biblia que conocemos hoy día? fue acaso de esas copias del SIV del Museo Británico y el Museo Vaticano? y qué opinión te merece que estos evangelios canónicos fueron creados por Eusebio de Cesarea y Lactancio por orden de Constantino? Muchas gracias

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