
• Marcos empieza diciendo: “Comienzo el evangelio de Jesucristo, hijo de Dios. Como está escrito en el profeta Isaías: He aquí que envío a mi mensajero para que te preceda y prepare tu camino”. Pues se equivocó Marcos. Lo que cita no es a Isaías sino a Malaquías 3:1. ¿El Espíritu Santo puede meter la pata? ¡Upss!!!...
No hay comentarios:
Publicar un comentario